El conflicto Árabe-Israelí: Necesidad de un manual para hacer amigos.
Slomon Ben-Ami, (Tánger, 1943), historiador, político y diplomático acaba de publicar un nuevo libro que con el título Profetas sin honor, analiza la larga lucha por la Paz en Palestina, desde la creación del Estado de Israel, en 1945 hasta la actualidad así como los sucesivos intentos por firmar un acuerdo que resolviera o congelara el conflicto permanente entre las dos comunidades, iniciativas que han terminado siempre en fracaso por ambas partes.
Formado en las universidades de Tel Aviv y Oxford, Ben-Ami ha ejercido como profesor en Tel Aviv, labor que compaginó con la política activa, llegando a ser miembro de la Kneset, embajador de Israel en España y ministro de Asuntos Exteriores. Actualmente es miembro de la Real Academia de Historia de España y vicepresidente y cofundador de The Toledo International Centre for Peace (CITpax).
La historia de Israel como Estado se inicia con su proclamación de independencia el 14 de mayo de 1948 a cargo de David Ben Gurion. El hecho histórico se logró después de más de sesenta años de esfuerzos políticos y diplomáticos por parte del sionismo para establecer una nación soberana en la que consideraban que era su patria, la antigua Tierra de Israel, también conocida como Palestina desde los tiempos del Imperio romano. Tras la llegada de Nasser al poder en Egipto 1952, se produjo un acercamiento a Estados Unidos y se forzó la retirada provisional de los británicos del canal de Suez que así renunciaban a dos tratados operativos de entonces: la Convención de Constantinopla y el Tratado Anglo-Egipcio de 1936, que hacían del Canal una zona neutral bajo control británico. Esta decisión alerto a los militares israelí que decidieron llevar a término la operación secreta Suzannah. Israel se oponía fuertemente al desalojo británico, ya que temía que su ausencia removería el efecto moderador que los británicos ejercían sobre las ambiciones militares del presidente egipcio, especialmente hacia Israel. En el verano de 1954, el coronel Binyamin Gibli, jefe de la Inteligencia Militar de Israel (Aman) , inició la Operación Suzannah con el fin de revertir dicha decisión. El objetivo de la operación era llevar a cabo diversas acciones de sabotaje en Egipto con el fin último de crear una atmósfera en la que los oponentes británicos y norteamericanos a la salida de los ingleses del canal de Suez, quedaran en supremacía táctica, permitiéndoles así bloquear dicha iniciativa. Cuando se lleva a cabo la Operación Susannah, la Unidad 131 era el centro de una amarga disputa entre el Aman y el Mossad sobre quién debía tener el control de la misma. Cuando la operación secreta salió a la luz, fue un escándalo mayúsculo que forzó la dimisión del Ministro de Defensa Pinhas Lavon.
Cabe recordar diversas campañas previas de atentados terroristas por parte israelí, contra intereses británicos para acelerar la proclamación de la Independencia, la mayoría llevados a cabo por el grupo Irgún, escindido de Haganá, en la practica una organización paramilitar sionista, la expresión armada y mas radical del sionismo revisionista fundado por Zeev Jabotinsky que defendía que todo judío tenia derecho a entrar en Israel y que solo represalias activas disuadirían a árabes y británicos de frenarlo. Para él solo una Fuerza Armada Judía garantizaría un Estado Judío. Cabe reseñar algunos choques destacados: el 22-7-46 se produjo un atentado con bombas en el Hotel Rey David de Jerusalén, sede de la Comandancia Militar del Mando Británico en Palestina y de la División de Investigación Criminal de los británicos, con el resultado de 91 fallecidos. El 30-12-47 hubo la masacre de la refinería de petróleo de Haifa a cargo de paramilitares sionistas lanzando granadas contra mas de un centenar de árabes apostados en la puerta principal de la refinería buscando trabajo. Una docena fallecieron y 42 resultaron heridos. Tras ello los trabajadores árabes atacaron a los trabajadores judíos y se produjeron 45 muertos y 91 heridos. Al día siguiente el grupo Haganá actuó en represalia y ataco diversos pueblos árabes cercanos en busca de familiares de los árabes que habían actuado el día anterior. Mataron indiscriminadamente y destruyeron viviendas. Los hechos son conocidos como la masacre de Baled al-Shayj resultando asesinados unos 70 palestinos.
Ya en la década de los 40, las autoridades británicas habían acusado al Irgún de perpetrar actos de terrorismo contra el gobierno del Mandato británico de Palestina y fue descrita como una organización terrorista por varios medios de comunicación, y una serie de prominentes figuras judías como Albert Einstein, Hannah Arendt y otros, como también Winston Churchill. Actualmente fuentes como la Enciclopedia Británica califican sus acciones como actos de terrorismo y una parte la opinión pública israelí sostiene también el carácter terrorista de la organización. Algunos de los dirigentes de la Haganá y otras organizaciones, como la Agencia Judía, acusaron al Irgún de crear un ambiente desfavorable para los intereses y futuro de los judíos, y hasta hoy se discute si sus acciones contribuyeron de facto al final del Mandato británico o si, por lo contrario, solo suscitaron hostilidad hacia los judíos.
Ben Ami, defiende que el tiempo para la construcción de dos estados, ya paso y que Israel es cada vez más la Sud-África del Apartheid.
Defiende que los acuerdos de Camp David, en los que el participo y tuvo un papel destacable, fueron la primera vez que las partes trataron de llegar a una solución definitiva y se confrontaron con el precio insoportable de la paz. Argumenta que este fracaso ha comportado que la derecha haya dominado desde entonces la política israelí. Recordemos que el movimiento Irgún fue el predecesor del partido nacionalista Herut que condujo al actual Likud que ha formado parte de todos los gobiernos israelíes desde 1977 y que Netanyahu preside. Hoy el gobierno israelí está formado por una amalgama de 6 partidos de los que algunos están a su vez coaligados entre ellos. El Likud del presidente cuenta con 32 escaños; seguido por los Religiosos del Judaísmo Unido de la Tora con 11; Ultraortodoxos del Shas con 7; Colonos del Sionismo Religioso del muy radical Itamar Ben Gvir otros 7; la Extrema Derecha Racista del Poder Judío 6 y Homofobia Institucionalizada con Noam, 1. En conjunto practican la ideología de extrema derecha, defienden la anexión de Cisjordania y la constitución de un solo estado, contrarios a una mayor representación femenina en el Parlamento, opuestos a cualquier manifestación pública de homosexualidad , defensores de los asentamientos israelís en tierra ocupada, homófobos, anti árabes, polémicos y defensores de la religión judía en la cotidiano.
La vida política en Israel se ha radicalizado con la propuesta de reforma judicial que propone en resumen mayor control del parlamento sobre el aparato judicial para limitar la capacidad de la justicia sobre la acción del legislativo y ejecutivo, base de la división de poderes, (cláusula de invalidación), así como las propuestas del extremista ministro de Seguridad Nacional de crear una Guardia Nacional que obedezca, no a los mandos policiales o militares, sino directamente al Ministro.
Se han vivido semanas de presión en las calles de rechazo de tales despropósitos y defensa de las bases democráticas de Israel que para algunos lleva camino de convertirse en una teocracia.
En pleno panorama he tenido que viajar al país y atender reuniones de patronatos en Jericó y Gaza, aplazados por la pandemia y también por el cierre militar de la ciudad de Jericó. En los más 55 años que llevo viajando a la zona , desde la guerra de los 6 días y mi estancia en el Kibuts Ramot Menashe, nunca había percibido tanto desorden en el mando, ni tanto intento de humillación al viajero proveniente de Gaza, naturalmente con permiso concedido por las mismas autoridades israelís y gracias a los buenos oficios del Consulado General de España en Jerusalén. Espectacular y extremadamente desagradable a la vez que ridículo. Observar y atender pasar por 3 veces por el escáner de seguridad, hora de frente, hora de lado, hora pies abiertos , hora juntos, hora zapatos, hora sin zapatos, mientras se entretenían a revisar con el aparato detector de pólvora, también por 3 veces, los mini frasquitos de jabón y crema suavizante complemento amenities del hotel, el cinturón, el bolsito de pastillas, daba carcajada. Si personas con mi trayectoria, recogida en los sucesivos interrogatorios aeroportuarios, relaciones y edad somos un peligro terrorista, no cabe duda que la infiltración, si la hay, no va por el aeropuerto Ben Gurion. Otra cosa son los intentos de hacer perder la compostura o facilitar la perdida del avión, ya fue justito, o el vano intento de quitar las ganas de regresar o las sobreras exhibiciones infantiles de mando. Presencie a una muchacha italiana que aterrorizada por perder el avión rompió a llorar y casi se arrodillo pidiendo por favor que la dejaran embarcar.
En mi próximo viaje, que lo habrá, deberé adquirir algunos ejemplares de algún manual de auto ayuda sobre: cómo hacer amigos, empieza a ser urgente.
ANNA BALLETBÓ
Licenciada en Ciencias de la Comunicación e Historia Moderna y Contemporánea, y diplomada en Periodismo y Ciencias de la Educación. Presidenta de la Fundación Internacional Olof Palme. Entre 1980 y 2000 fue diputada en el Congreso de los Diputados de España.
Publicado en: lahoradigital
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