Desde hace tiempo hay voces críticas que denuncian un proceso de globalización desigual que favorece a determinadas organizaciones internacionales que se posicionan junto con los poderosos.
Entre esas voces de autoridad se encuentra el autor israelí Nadav Eyal que publica en español su último libro “Revuelta: desde las trincheras del levantamiento mundial” donde muestra hasta qué punto la globalización contemporánea es insostenible.
El periodista defiende que el origen del actual colapso del orden mundial proviene sobre todo del descontento hacia unas estructuras de poder que se han vuelto huecas y corruptas, o que simplemente no responden a las necesidades más urgentes de la población.
Revuelta es una mirada original a la creciente resistencia popular hacia la globalización y una advertencia de cómo esta resistencia puede contribuir a socavar el progreso y propiciar los movimientos identitarios.
Después de la Segunda Guerra Mundial los candidatos nacionalistas extremistas no tuvieron éxito en Occidente en ese momento debido a este espíritu cauteloso, que también permitió que florecieran las instituciones internacionales.
Fue en este clima, dice Eyal, que los gobiernos pudieron unirse, pero “Esa era de unidad global ha terminado”, afirma categórico.
Según explica progresivamente lo ha reemplazado un mundo en el que tanto la derecha como la izquierda se están alejando cada vez más del centro, y donde el nacionalismo y el populismo tóxicos están prosperando.
En lugar de argumentar sobre el reciente ascenso de líderes nacionalistas como Trump o Jair Bolsonaro en Brasil, o Vladimir Putin en Rusia, Eyal apunta a centrarse en las personas que sienten que se han quedado atrás en la economía global.
Si bien muchos líderes autoritarios de todo el mundo recientemente cortejaron a sus ciudadanos con apelaciones al nacionalismo, Eyal postula que esta energía podría cultivarse para otros fines.
Si las únicas personas que otorgan legitimidad a quienes se sienten rezagados son los radicales, entonces se verán atraídos hacia los políticos radicales y autoritarios.
Lo que Eyal quiere ver es una “corriente principal radical”, donde los políticos más moderados ofrezcan una solución a los problemas muy reales de la globalización, en lugar de “los lados radicales de su partido”.
La solución no es el nacionalismo, sino una globalización mejor y más cooperativa. Pero para eso los líderes internacionales deben atreverse a ofrecer soluciones, de lo contrario puede ser tarde.
NADAV EYAL
Periodista y comentarista israelí, que se desempeñó como editor de noticias extranjeras para Channel 13. Autor de libros.
Redacción
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