Si se usa de manera correcta, la hidrolavadora se convertirá indudablemente en una herramienta muy valiosa para nuestros hogares ya que nos permitirá remover prácticamente cualquier tipo de suciedad o mancha. Al rociar agua bajo presiones muy altas (su potencia se estima entre 10 a 50 veces superior al de una manguera de jardín), permitirá economizar agua y limpiar objetos como: vehículos, pisos, techos, paredes, etc.
Además, son máquinas muy prácticas, de fácil traslado y con una curva de aprendizaje rápida, por lo que no requieren de personas expertas para manipularlas. Sin embargo, hay que tener cuidado con su uso, pues una mala manipulación puede dañar una propiedad.
Funcionamiento de una hidrolavadora
A pesar de que algunos modelos cuentan con sus propios tanques de agua, la mayoría de las hidrolavadoras requieren conexión a una toma de agua del hogar. Una vez que la máquina reciba el líquido, esta va a una bomba de agua la cual forma parte de la hidrolavadora. La bomba en sí no es la encargada de generar la alta presión en el agua, sino su motor (el cuál dependiendo de la hidrolavadora, puede ser eléctrico o de gasolina) el cuál impulsa el agua hacia la válvula y finalmente a la boquilla.
Es importante mencionar que tanto la válvula de regulación como la boquilla actúan como elementos de resistencia al flujo de agua. Esto permite ofrecer diferentes tipos de chorros de agua dependiendo de la superficie y suciedad a tratar.
Algunos modelos de hidrolavadoras admiten el uso de detergentes y otros agentes limpiadores lo cual potenciará aún más la tarea de limpieza.
Tipos de hidrolavadoras
En el mercado es común encontrar dos tipos de hidrolavadoras fundamentalmente: las de electricidad y por combustión.
Por electricidad
Son hidrolavadoras que funcionan con un motor eléctrico. Si bien esto supone limitantes en cuanto a su desplazamiento (deben mantenerse enchufadas a una toma de electricidad), suelen ser los modelos más ligeros y fácil de usar.
Por combustión
Requieren de gasolina o gasoil para funcionar por lo que usan un sistema de arranque manual. Son las que ofrecen mayor potencia y movilidad debido a que no requieren tomas de corriente. Sin embargo, su uso es recomendado exclusivamente para limpiezas de exteriores pues son máquinas que emanan gases y requieren de buena ventilación.
Usos y ventajas de las hidrolavadoras
- Permite ahorrar tiempo y esfuerzo ya que, al usar agua a presión, remueve más rápido la suciedad.
- Se reduce considerablemente el uso de detergentes al limpiar superficies con grasas, aceites o resinas. Esto es muy útil sobre todo al lavar un automóvil o motocicleta
- Al usar agua a presión, permite limpiar aquellos espacios complicados los cuales se encuentran cercados o con rejas.
- En caso de tener una casa y esta tenga un sendero de concreto en su exterior, con la hidrolavadora se podrán eliminar musgos y otros elementos externos.
Consideraciones al usar una hidrolavadora
- Evite usar esta máquina si no cuenta con circulación de agua. Si la bomba funciona en seco, acortará la vida de la misma.
- No use líquidos como ácidos, abrasivos o alcalinos ya que puede afectar el funcionamiento de la bomba
- Es recomendable limpiar el filtro de entrada de agua al menos 1 vez a la semana. En el caso de la boquilla, esta debería limpiarse al menos una vez a mes.
Sugerencias
Redacción