martes, 30 mayo 2023

Maldivas, los lugareños que salvaron su isla

Las Maldivas son un punto turístico importante, pero las ansias de explotación a menudo tiene un costo para el medio ambiente. Una comunidad de lugareños defendió los intereses de la isla para evitar el desastre.

Desde arriba, la isla de Rasdhoo, en el Océano Índico, se asemeja vagamente al contorno de una raya: una extensión compacta de tierra rodeada de arrecifes en forma de alas bajo las claras aguas azules fluorescentes.

Rasdhoo, una de las casi 1.200 islas que componen las Maldivas, es popular entre los turistas como lugar de buceo, gracias al próspero ecosistema de arrecifes de coral que la rodea. En la superficie, es bastante próspero: las calles están llenas de tiendas de regalos, restaurantes y centros de buceo y esnórquel. Los turistas se alojan en una de sus 16 casas de huéspedes.

A menos de un kilómetro de la costa este de Rasdhoo se encuentra Madivaru, un pequeño islote deshabitado, y Madivaru Finolhu, que es poco más que un estrecho y prístino banco de arena. Son conocidos como las “islas de picnic”.

Los turistas visitan para hacer snorkel, tomar el sol y observar los cielos rosados ​​de espectaculares puestas de sol de Maldivas.

Estas islas de picnic también marcan una rara victoria para la comunidad local contra un desarrollador de un complejo turístico importante, con tal de ayudar a proteger los arrecifes del daño que podría suponer.

En 2019, la propiedad de las islas de picnic fue entregada a la Agencia de Protección Ambiental, que será administrada por el Consejo del Atolón Rasdhoo.

Sin embargo, en 2015, el gobierno de Maldivas anunció la venta de las islas de picnic a un desarrollador de complejos turísticos con planes de convertirlas en otro complejo de islas privadas de lujo, cortando el acceso a las personas en Rasdhoo.

“La isla Madivaru ha pertenecido a los lugareños de la isla Rasdhoo por generaciones. Nuestra playa es demasiado rocosa y no es ideal para practicar snorkel y otras actividades “, explica Amir Ahmed, un residente de Rasdhoo que trabaja como gerente de ventas y marketing en una casa de huéspedes en la isla.

Además, el proyecto de construcción habría consistido en aspirar arena del fondo de la laguna cercana para expandir las islas de picnic, con el riesgo de daños significativos al arrecife ya que la sedimentación puede asfixiar el coral.

“Luchamos duro” asegura la comunidad maldiva sobre este éxito en la conservación de su isla.

Redacción
En Positivo

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