Con los tiempos que corren, más de uno se la quedaría y aprovecharía para cumplir con el clásico “tapar huecos”, se daría un festín a base de mariscadas o escaparía lejos para no volver. Para gustos, colores. Hay otros, honrados, que prefieren acudir a la autoridad -voluntariamente y no por orden de un juez- con tal suma de dinero. Y es que, a veces, se cumple eso de que quienes más dan son los que menos tienen.
Así sucedió la semana pasada en Dorchester (Massachusetts) donde un sin techo encontró una mochila con 42.400 dólares (31.345 euros al cambio) mientras merodeaba en un centro comercial. El tipo, de nombre Glen James, ha pasado del rechazo social al estrellato sólo por entregar la mochila a la policía que resolvió el caso. La bolsa y su contenido eran propiedad de un estudiante chino.
La historia podría acabar aquí, como un relato anónimo sobre la honradez. Sin embargo, la policía decidió convocar una rueda de prensa para enaltecer la labor ciudadana de Glen James, un hombre que ronda la cincuentena y que ha pasado sus últimos 5 años haciendo la calle. A la cita también acudió el alcalde de Boston, Tomas Menino, y la prensa americana -tan sedienta de historias personales- no tardó en propagar la noticia por tierra, mar, aire y redes sociales.
Hasta tal punto que la historia necesita de un segundo protagonista para rizar el rizo del final feliz. Aquí interviene Ethan Wittington, hasta ahora un director de marketing de Virginia. Leyó la noticia en los medios y tiró de inventiva para compensar a Glen James mediante un crowdfunding, ese mecanismo tan de moda que recoge donaciones privadas por una buena causa.
Wittington, en declaraciones al The Boston Globe, ha destacado que “es estimulante ver a alguien haciendo algo tan honrado” y más con esta crisis en la que “donde sea de América, se te inunda de noticias negativas a diario. No pasa el día que oímos constantemente como demócratas y republicanos discrepan, hay un tiroteo en alguna parte o sale alguna novedad sobre el caso de Trayvon Martin”. “Sabes… tenemos que ir juntos y hacer de esta nación un sitio mejor”, sentencia Wittington.
Las redes sociales han hecho el resto y los usuarios de todo el mundo han aportado su granito de arena hasta recolectar más de 111.000 dólares (más de 82.000 euros al cambio) de más de 4.500 donante en sólo tres días. Y no sólo dinero, si no que Wittington afirma que ha recibido ofertas de cobertura dental, ordenadores, muebles, ropa y trabajo para Glen James.
Parece que aún queda gente honrada, gente que quiere propagarlo y gente que lo recompensa.
Carlos Betriu
Redacción