No sé si podemos cambiar el mundo al escribir pero podemos imaginar cómo podríamos cambiarlo.
El optimismo se presente como una opción salvadora. Nunca como ahora los movimientos que prometen la felicidad son tan fuertes y osados pues incluyen la posibilidad de materializar la felicidad de forma inmediata, la capacidad de conseguirla “a solas” y la accesibilidad para todo el mundo.
En cuatro años, el cuadragésimo cuarto presidente de Estados Unidos ha llevado a cabo al menos tres revoluciones.
Obama tiene más sensibilidad por lo que ocurre en el resto del mundo y, como consecuencia, representa menos peligro para todos.
Magistrados denuncian usura, abuso y enriquecimiento injusto de los bancos.